Y O N K I S
Son las 19 32 y en Santiago hace calor. Es por la tarde y estoy con Cande, a ver si nos vamos a ver el partido mientras nos tomamos unas tapitas en el Luis. Podría subiros millones de fotos chorras de Cande y yo haciéndo el subnormal por la casa, por la calle o por la facultad adelante. Prefiero poneros ésta, de cuando nos reímos. No se si realmente alguien lo leerá. No se si nadie me lee más que porque lo obligo (jeje) pero quiero decir al mundo que Cande mola, es una persona alta, delgaducha (come tía jajaja) asi rubia (ejem) y de ojos verdes. Le gustan todo tipo de batallas. Sobre todo las que empiezan cuando te pega un tirón de pelo mientras tú estas cenando en la cocina, o las que empiezan cuando la tiras de un empujón a la cama y ella se levanta a trompicones (con lo patosa que es la pobriña), toda despeinada y arrastrándose mientras le cierras la puerta en las narices jajajaajajaja. Mola. Lo que molan son las cremas que tiene en su cesta de las cremas. Ahí te puedes encontrar desde potingues con aceite de oliva, cremas para que los codos no se te sequen, para que el calzado no te roce, el champú de los campamentos, la crema de la colonia de su madre, brillos de labios variados (y si, ella tiene aún los brillos de la barbie que también me habían regalado de pequeña y taaaanto me gustaban).
Lo que mas mola (y reconozco que al principio me asustaba) era cuando decíamos dos palabras al mismo tiempo, o estabamos pensando lo mismo... o cuando hicimos nuestro primer "videoclip" casero y vimos que marcabamos los pasos de igual manera... Luego empezaron a confundirnos... y a decir si éramos hermanas (si, hermanas pf, qe gentuza jeje)... en fin... podría escribiros muchas cosas de Candela, pero solo os contaré una última anécdota: Cuando aún éramos novatas, allá por aquellos años de la resi, nuestras veteranas nos habían mandado asaltar la Internacional armadas con una percha y secador, y con una media en la cabeza... Antes de empezar y aún sin saber muy bien qué ibamos a hacer nos cogimos de la mano y nos dijimos. No me sueltes nunca ¡por favor! y desde aquella han pasado 3 años, en los que su mano siempre ha estado colgada a la mia, para todo lo bueno (buenas notas en algún trabajo, que me hiciese de modelo en variadas ocasiones, los videoclips y las risas que nos echábamos en la resi, las investigaciones a las monjas....) y los no tan buenos (no hace falta ponerlos aquí ¿no?)
Sé feliz (sin mi), aunque espero hacerte otra parida de éstas el año que viene en agradecimiento a tus servicios. (guiño, guiño)
Te Quiero.
PD: Oye, nos vamos luego a dar una vuelta hasta la catedral? =)jjaajajajajjajajaj
